Uno de mis objetivos es que las personas que trabajan conmigo adquieran el suficiente conocimiento sobre los alimentos y sobre el tipo de dieta que más les convienen para que sean personas autónomas.

Es una de las razones por las que me niego a dar una dieta.

Quiero que aprendas a hacer tus propios menús siendo consciente de que es lo mejor para ti en cada momento. Como la vida no es algo lineal, tu dieta tampoco lo es y cambiará según las circunstancias.

Lo importante es que adquieras el conocimiento necesario y que cuentes con los recursos suficientes para que te conviertas en la protagonista de tu alimentación.

Este va a ser el primero de los tres posts que voy a escribir sobre este tema.

Como todo en esta vida, vamos a empezar por los cimientos.

Para empezar a tomar las riendas sobre tu salud, no hay mejor manera que empezar a cocinar.

Estarás pensando, pero si no me da la vida, como para ponerme a cocinar!.

No se trata de que de la noche a la mañana tengas que cocinar cada una de tus comidas pero empieza poco a poco. Experimenta y piensa que cocinar no tiene porque ser la tarea de una gran chef.

Puedes hacer platos sencillos que no requieran mucho tiempo.

Es todo cuestión de práctica.

Además le puedes dar otro enfoque.

Cuando pienso en la cocina me viene a la mente la novela de Laura Esquivel, Como agua para chocolate. Es una historia de amor, en la que la protagonista creció en la cocina, lugar donde encontraba su mayor consuelo.

Lo que me gustó es cómo cada uno de los platos que cocinaba tenían diferentes efectos en las personas que los comía.

Piensa en cómo cocinar no es sólo el hecho de hacer la comida, sino el cariño y el amor que pones en ello.

Míralo como un regalo que te haces a ti  misma y a tu familia.

Así que vamos allá.

¿Cómo esta tu cocina?

¿Cuentas con los suficientes recursos para embarcarte en esta experiencia o tienes un microondas y poco más?.

En caso de que tu cocina parezca el desierto del Gobi, algunas cosas básicas que vas a necesitar son:

  • Tabla para cortar
  • Cucharas, espumaderas, cuchillos
  • Un puchero, si puede tener la opción para cocinar al vapor, mejor.
  • Sartén
  • Tupper, a ser posible de cristal en vez de plástico.
  • Olla a presión
  • Batidora

Una vez que tienes el material adecuado, es hora de pienses qué vas a comer.

Lo ideal es que cuando hagas tú menú escojas alimentos de temporada.

Estos son los beneficios que encontrarás al consumir este tipo de alimentos:

  • son más baratos, ya que son los que abundan en este momento
  • al pasar menos tiempo desde que se recolectan hasta que se consumen tienen más nutrientes
  • tienen más sabor y más calidad
  • cada estación proporciona los alimentos que necesita el cuerpo en ese periodo del año. Por ejemplo, las frutas abundan en primavera y verano, es la época en la que más apetece comerlas. En cambio en invierno dan sensación de frío.
  • al consumir alimentos de temporada reduce el impacto en el medioambiente. Cuantos más kilómetros hace un alimento para llegar a tu plato, mayor es el impacto que produce.

Durante este mes de abril, éstos son algunos de los alimentos que puedes comprar:

  • Frutas: Fresa, Kiwi, Melocotón, Pomelo, Mandarina, Plátano, Albaricoque, Pera, Manzana,
  • Verduras: Acelga, Alcachofa, Calabacín, Calabaza, Guisantes, Espárragos, Remolacha, Brocolí, Berenjena, Espinacas, Coliflor
  • Pescados: Bacalao, Salmón, Merluza, Rape, Gallo, Trucha, Atún

Si tienes inquietud por consumir alimentos que estén lo menos contaminados posible te paso esta lista para que te ayude en la elección.

los 12 alimentos mas y menos contaminados

Las tareas para esta semana son:

  1. Chequea tu cocina para ver si tienes todo lo necesario
  2. Piensa cuáles son los alimentos de temporada que más te gustan

Luego avanzaremos y miraremos cómo:

  1. elaborar tu menú semanal
  2. hacer la lista de la compra
  3. ir de compras

Pero, para esto tendrás que esperar a la semana que viene.

Por ahora ponte manos a la obra!.